diumenge, 25 de novembre del 2018

Poetes en el taller

Cáscara y burbuja

15-10-2018

Rompiste mi universo
con aquel primer beso.
Vivía en un mundo
cáscara de nuez,
en una nube oscura
rellena de agua,
lista para llover.
Había pecado
contra mi voluntad,
al fundir mis labios
con tu dignidad.



Voló el alma
a un cielo evanescente,
y tú… con ella.


Habías pasado a ser
una burbuja inmaterial,
ajena a mis neuronas,
en la central nuclear
de mi espíritu inmortal.


José Luís Navarré Rozalén

dijous, 24 de maig del 2018

Ejercicios de escritura VIII





   


Esta vez tenéis que escribir un texto --microrelato, relato corto, cuento, poema-- para cualquiera de los títulos que propongo.
També està l'opció d'escriure el text en valencià.


Resultat d'imatges de cucharaEl extraño caso de la cuchara 


    L'estrany cas de la cullera







Un farol cualquiera       


Un fanal qualsevol                                             








La hoja rota


La fulla trencada




Recordad que esto son los títulos, no necesariamente tiene que aparecer esta frase en vuestro relato.
Y tenga la extensión que tenga el relato, incluso el microrelato, intentad que tenga, como siempre, una introducción, el nudo de la historia y un desenlace. 

dimarts, 8 de maig del 2018

Poetes en el taller

Esta vegada publiquem un poema d'un component del taller.
Jutgeu vosaltres mateixos, la poesia obri tota mena d'interpretacions, encara així no podreu negar que no són sentits i colpidors.

***************
Esta vez publicamos un poema de un componente del taller.
Juzgad vosotros mismos, la poesía abre toda clase de interpretaciones, aún así no podréis negar que no son sentidos i conmovedores.



31/03/2018
Fotografía de Iratxe Ávarez 



Mira como el viento

hace sudar al árbol.

Como supura su savia,

como mueve

sus múltiples brazos.

Esas ramas crucificadas

que un día serán
 
pasto de la hoguera.

Mira como en su tronco

van sumando anillos sus años.


Yo, de mayor,

quiero ser árbol,

quiero ser pino,

alumbrar un día al pastor

sentado al calor

de un vaso de vino.


José Luís Navarré Rozalén

Poetes en el taller

Esta vegada publiquem un poema d'una component del taller.
Jutgeu vosaltres mateixos, la poesia obri tota mena d'interpretacions, encara així no podreu negar que no són sentits i colpidors.

***************
Esta vez publicamos un poema de una componente del taller.
Juzgad vosotros mismos, la poesía abre toda clase de interpretaciones, aún así no podréis negar que no son sentidos i conmovedores.


LA ESPERA
Little Islands Photography


Prepara su cuna
Soñando en silencio
Le cuenta cuentos
Le pinta estrellas

Recitando nanas al alba
Le espera impaciente
El cuerpo le tiembla
Acaricia su vientre

El agua se rompe
Las entrañas se retuercen
Sabanas verdes teñidas de sangre
Un grito en la noche
Un llanto de madrugada

Los cuerpos se encuentran
Le canta nanas
Le pinta estrellas
De besos le cubre
Con amor le viste


Concha Estellés Pascual



dijous, 29 de març del 2018

Actividades para practicar la escritura V

Continuando con los ejercicios para practicar la escritura, os publico aquí los dos grupos de palabras que hemos estado trabajando en el taller. Podéis realizar un escrito, del tipo microrrelato o relato breve, si queréis. Os recomiendo coger solo tres palabras como mucho si lo que vais a escribir es un microrrelato, para que no quede demasiado cargado con palabras de este tipo, tan elaboradas. Ahora bien, si os resulta sencillo, y os gusta, y queréis poner más palabras de la lista, o listas, entonces ¡adelante!

La extensión de los dos tipos de escritos que os he recomendado es la siguiente:

  • para microrrelato, por norma general, entre cinco y doscientas palabras;
  • para relato breve: mínimo 600 palabras, que es aproximadamente una página y media (tamaño folio). Máximo 1000 palabras, que son más o menos dos páginas y media; 750 palabras son aproximadamente dos páginas.
Pinterest

Primer grupo de palabras

Inmarcesible, elocuencia, inefable, etéreo, melifluo.


Inmarcesible
Del lat. immarcescibĭlis.
1. adj. Que no se puede marchitar.

Elocuencia
Del lat. eloquentia.
1. f. Facultad de hablar o escribir de modo eficaz para deleitar, conmover o 
persuadir.
2. f. Eficacia para persuadir o conmover que tienen las palabras, los gestos o 
ademanes y cualquier otra acción o cosa capaz de dar a entender algo con viveza.
La elocuencia de los  hechos, de las cifras.

Inefable 
Del lat. ineffabĭlis 'indecible'.
1. adj. Que no se puede explicar con palabras.

Etéreo, a
Del lat. aetherĭus, y este del gr. αἰθέριος aithérios.
1. adj. Perteneciente o relativo al éter.
2. adj. poét. Perteneciente o relativo al cielo.
3. adj. poét. Vago, sutil, vaporoso.

Melifluo, flua
Del lat. mellifluus 'que destila miel'.
1. adj. Que tiene miel o es parecido a ella en sus propiedades.
2. adj. Dulce, suave, delicado y tierno en el trato o en la manera de hablar (usado más  en sentido peyorativo)

Fuente: diccionario de la RAE. 

Segundo grupo de palabras

Iridiscencia, serendipia, efímero, epifanía, luminiscencia, arrebol. 

Estas, las buscáis vosotras en el diccionario. 

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Continuant amb els exercicis per a practicar l'escriptura, vos publique ací els dos grups de paraules que hem estat treballant en el taller. Podeu fer un escrit, tipus microrrelat o relat breu, si voleu. Vos recomane agafar tres paraules com a molt si el que aneu a escriure és un microrrelat, per a que no quede massa carregat amb paraules d'aquest tipus, tan elaborades. Ara bé, si vos resulta sencill, i vos agrada, i voleu posar-ne més, aleshores endavant!
L'extensió dels dos tipus d'escrits que vos he recomanat és la següent:

  • per a microrrelat: com a norma, entre 5 i 200 paraules;
  • per a relat breu: mínim 600 paraules, que és aproximadament una página i mitja (un full). Màxim 1000 paraules, que són més o menys dues págines i mitja; 750 paraules són aproximadament dues pàgines.

Primer grup de paraules

Immarcescible, eloqüència, inefable, eteri, mel·liflu. 


Segon grup de paraules

Iridiscència, serendipitat, efímer, epifania, luminiscència, vermellor.

dijous, 8 de març del 2018

NOSOTRAS, la sombra del 27

Para celebrar el Día Internacional de la Mujer este relato de Concha Estellés Pascual.



NOSOTRAS, la sombra del 27 


A esa hora imprecisa en la que el día se confunde con la noche, solitaria como un fantasma, repasa Eduarda las páginas escritas. Satisfecha, por fin, aspira el aire limpio y húmedo del anochecer, un silencio denso invade la estancia. Tras el cristal de los ventanales observa la fina lluvia que bajo la farola de la calle se ve caer. 

Cree percibir el aroma a tierra mojada que anuncia el principio del otoño.
Absorta en su trabajo continúa pasando notas y apuntes de las amarillentas hojas repletas de garabatos, de una pequeña libreta que siempre lleva consigo.
Tiene por costumbre sentarse en un banco de la Alameda y, desde allí, observar con disimulo a las niñeras en sus paseos matutinos y los soldados intentando entablar conversación con ellas; a los niños jugando a la peonza y las niñas con sus muñecas de porcelana.
Pobres niñas ricas, destinadas a tener unas vidas vacías y sumisas,¡se lamenta al verlas! Con un suspiro cierra la sombrilla, saca su libreta cerciorándose de no ser observada y con disimulo toma notas breves, concisas, simples esbozos que le permitan más tarde, en la soledad de su habitación,crear sus historias.
Muchas de ellas no serán las historias que quiere escribir y tampoco llevarán su nombre. ¡Está mal visto!, tendrá que usar el de Adebel, seudónimo bajo el que esconderá su identidad. De otro modo, La Díscola jamás será conocida.
El monótono ruido del teclado de la Remington, vuelve a resonar en el silencio de las cuatro pareces vacías. A penas una mesa con su silla enfrentada a la pared, lejos de los visillos que cubren la ventana, para así no ser vista mientras escribe. Junto a la máquina de escribir, que durante horas resuena sin pausa, un candil con luz cálida que acoja a sus personajes, algunos de ellos con su voz propia le susurran al oído, indicándole el camino que quieren seguir, otros más dóciles le dejan hacer y ella es la que les dirige a su antojo, formando parte poco a poco de esos escenarios que imagina. 
Las horas pasan rápidas envueltas en el monótono sonido del teclado, el cielo grisáceo no deja filtrar el sol del amanecer. Satisfecha al fin aspira el aire limpio y húmedo.
En la palancana de porcelana lava sus manos, cuello y cara, lleva las mismas ropas del día anterior, ¡no importa!, su aspecto serio, recatado y elegante sigue siendo el mismo. 
Sacude su falda ahuecando la enagua, recoloca las orquídeas de su moño y frente al espejo se encasqueta el sombrero. 
Con su texto, La Díscola, en el interior del bolso de mano, sonríe satisfecha al contemplar su imagen, recordando el apodo que reciben las mujeres como ella.
«Las sin sombrero», por aquel acto de rebeldía y atrevimiento al quitarse el sombrero frente a la Puerta del Sol.
Ha sido una época convulsa en la que se han tenido que enfrentar a adversas circunstancias. Nada nuevo en realidad para estas mujeres luchadoras siempre en armas contra un mundo, en un tiempo en el que con delicadeza son ignoradas, sin embargo ellas están decididas a abrir nuevos horizontes.
En su pensamiento todas esas mujeres ilustres sin nombre, invisibles compañeras, arrojadas al desaliento en la lucha por un espacio en el mundo de hombres.
Antes de salir a la calle aspira profundamente una, dos e incluso por tres veces consecutivas, se ajusta el corpiño y con paso firme y rígido cierra la puerta tras de sí, adentrándose en el difícil camino que, orgullosa, se decide a recorrer.

Concha Estellés Pascual

Imagen extraída de aquí

dijous, 22 de febrer del 2018

Su esencia

Me siento como un niño
que ha perdido a su ídolo,
Imagen extraída de la web
su padre, su confesor,
su amigo.

He quedado huérfano,
me siento solo.
Pastor de este ganado
que en herencia me han dejado.

¡Señor, dame fuerzas!
Y tú... mujer...
te necesito ahora
para que me dejes reposar
la cabeza en tu regazo.
Así, cómodo, llorar y rezar
esta pena mía que sabe
a azufre y sal.

José Luís Rozalén

Activitats per a practicar l'escriptura III

Esta setmana hem decidit en el taller fer una descripció com a exercici i, després de llegir tots els escrits de les components del taller i amb la inspiració activada, hem elegit nosaltres mateixes les paraules per a utilitzar en la descripció, Cadascuna de les participants vam dir una paraula per a la llista. I va quedar així:

Susceptible, patracol, records, inversemblant, alfàbega, platja, llibertat, font, penetrant.


***

Esta semana hemos decidido en el taller hacer una descripción como ejercicio y, después de leer todos los escritos de las componentes del taller y con la inspiración activada, hemos elegido nosotras mismas las palabras para utilizar en la descripción. Cada una de las participantes dijimos una palabra para la lista. Y quedó así: 


Susceptible, mamotreto, recuerdos, inverosímil, albahaca, playa, libertad, fuente, penetrante.

Ejemplo de descripción


Un ejemplo de como se puede realizar una descripción de algún lugar físico intercalando anécdotas, recuerdos, sensaciones y lograr transportar al lector hasta ese lugar:

Todo el mundo decía que mi padre, mi Baba, había construido la casa más bonita de Wazir Akbar Kan, un barrio nuevo y opulento situado en la zona norte de Kabul. Algunos aseguraban incluso que era la casa más hermosa de todo Kabul. 
Una ancha entrada, flanqueada por rosales, daba acceso a la amplia casa de suelos de mármol y enormes ventanales. Los suelos de los cuatro baños estaban enlosados con intrincados azulejos escogidos personalmente por Baba en Isfahan. Las paredes estaban cubiertas de tapices tejidos en oro que Baba había adquirido en Calcuta, y del techo abovedado colgaba una araña de cristal. En la planta superior estaba mi dormitorio, la habitación de Baba y su despacho, conocido también como « el salón de fumadores» , que olía permanentemente a tabaco y canela. Baba y sus amigos se recostaban allí, en los sillones de cuero negro, después de que Alí les sirviera la cena. Rellenaban sus pipas (lo que Baba llamaba « engordar la pipa» ) y discutían de sus tres temas favoritos: política, negocios y fútbol. 
A veces le preguntaba a Baba si podía sentarme con ellos, pero él, aferrado al marco de la puerta, me contestaba: —No digas bobadas. Éstas no son horas. ¿Por qué no lees un libro? Luego cerraba la puerta y me dejaba allí, preguntándome por qué para él nunca « eran horas» . Yo me quedaba sentado junto a la puerta, con las rodillas pegadas al pecho, a veces una hora, a veces dos, escuchando sus conversaciones y sus carcajadas. 
El salón, situado en la planta baja, tenía una pared curva con unas vitrinas hechas a medida donde se veían expuestas diversas fotografías de familia: una foto vieja y granulada de mi abuelo con el sha Nadir, tomada en 1931, dos años antes del asesinato del rey; están de pie junto a un ciervo muerto, con botas que les llegan hasta las rodillas y un rifle cruzado sobre los hombros. Había también una foto de la noche de bodas de mis padres. Baba vestía un traje oscuro, y mi madre, que parecía una joven princesa sonriente, iba de blanco. En otra se veía a Baba y a su socio y mejor amigo, Rahim Kan, en la puerta de casa; ninguno de los dos sonríe. En otra aparezco yo, de muy pequeño, en brazos de Baba, que está serio y con aspecto de cansado. Mis dedos agarran el dedo meñique de Rahim Kan. Al otro lado de la pared curva estaba el comedor, en cuyo centro había una mesa de caoba capaz de acomodar sin problemas a treinta invitados. Y, con la inclinación que mi padre sentía por las fiestas extravagantes, así era prácticamente cada semana. En el extremo opuesto a la entrada había una alta chimenea de mármol que en invierno estaba siempre iluminada por el resplandor anaranjado del fuego. 
Una gran puerta corredera de cristal daba acceso a una terraza semicircular que dominaba casi una hectárea de jardín e hileras de cerezos. Baba y Alí habían plantado un pequeño huerto junto a la pared occidental: tomates, menta, pimientos y una fila de maíz que nunca acabó de granar. Hassan y yo la llamábamos « la pared del maíz enfermo» .


Cometas en el Cielo, Khaled Hosseini.

dissabte, 10 de febrer del 2018

Mirada azul




Todos los días salgo a la orilla del mar
para ver si la vuelvo a encontrar
pero en vano oteo el horizonte
y mis ojos se cansan de mirar.

Mali Ferrer

dissabte, 3 de febrer del 2018

Activitats per a practicar l'escriptura II

Frase proporcionada:

"Sentado en lo alto del caparazón de la tortuga ¡cabalgando por el mar como si fuera a caballo!"





Lista de palabras proporcionada:

copa               
luces             
a                   
caracol       
dos 




La compañera de taller, Concha, ha escrito estos microrelatos con la frase que dictamos en el taller y con la lista de palabras:

Navega sin rumbo, consumiendo las palabras, cabalgando sobre el tiempo. Mira hacia atrás a ese espacio donde se abre el claro del horizonte dibujado en la palma de su mano, piensa en ella a sabiendas que ya no puede retenerla, que debe marchar allá donde aún queda esperanza, donde el desaliento no alcanza y el sol sigue asomándose entre las nieves.
Mira su retrato, mientras se estremece y sus ojos se hacen agua sabiendo, que pronto será solo un recuerdo de ese ayer que pasó sentado en lo alto del caparazón de la tortuga ¡cabalgando por el mar como si fuera un caballo!

                                                                           Concha Estellés


Camina despacio sobre los cristales rotos de la copa, la sombra de su cuerpo cubre el espacio donde las luces dejan de brillar y los ecos del silencio rellenan los huecos del ayer. Le mira con los ojos del desprecio que llega cuando del ídolo no queda nada. Eran dos que formaron un todo, unidos por la fuerza, a golpe y fuego, como el caracol caminaban con la casa a cuestas y así eran felices, se acostumbraron a tenerse el uno al otro. ¡Para que pedir más!, pero llegó él, y dejaron de ser dos cuando sin más vivió entre ellos y la furia se desató. Fue como un huracán, soplando tan fuerte que a su paso lo destruyó todo. Después de aquello Elisa no volvió a ser feliz, observaba con resignación silenciosa como la habían dejado a un lado, desquiciada, apartada igual que un trasto viejo e inservible.
Ellos, bebían cerveza y reían, mientras ella en un rincón esperaba alguna migaja de su atención, así pasaron los días y de pronto no pudo más. ¡Gritos! Golpes y más gritos. Luego silencio, sangre y cristales rotos sobre el suelo. Ya no eran dos, ni tres. Ella y su soledad, nada más.


                                                                         Concha Estellés



Y este es de la compañera Ana, con la misma frase y la lista de palabras, fundidas en un mismo relato:



LIBRES

Sentado en lo alto del caparazón de la tortuga ! cabalgando por el mar como si fuera a caballo!.
El caracol se sentía satisfecho de haber aceptado la invitación de su amiga la tortuga.
La aventura que juntos habían decidido emprender, quedó sellada la noche anterior, con una copa y un brindis. Ahora galopaban los dos a través de las olas, tal jinete y montura, buscando luces en la oscuridad, en pos de una meta: la libertad. 

                                                                                   Ana Caudet

Pepita Gadea nos ha escrito también este microrelato:

No sabía exactamente el tiempo que se encontraba en esa isla a consecuencia de un error de navegación, ya que su lancha había naufragado. Mohamed  estaba observando el mar, como cada día solía hacer nada más despertar, en eso observó a lo lejos algo que se movía. ¿Sería una barca? ¿Sería otra persona a quien le habría ocurrido lo mismo?
Así estuvo haciendo señales con los brazos sin parar. Observaba que cada vez estaba más cerca --¡qué alegría!--. Pero cual fue su decepción cuando se dio cuenta de que lo que llegaba a la orilla no era lo que esperaba, su salvación, sino un simple mono sentado en lo alto del caparazón de una gran tortuga cabalgando por el mar como si fuera a caballo.
Pensó --¿por qué no puedo salir de esta maldita isla haciendo lo mismo?-- Y en ese mismo instante se oyó a lo lejos el maldito despertador. 
¡Todos los días lo mismo!

Pepita Gadea


dimarts, 16 de gener del 2018

Activitats per a practicar l'escriptura I

En  clase hemos practicado la escritura con un ejercicio que consistía en utilizar las palabras de la lista en una frase o párrafo.

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En classe hem practicat l'escriptura amb un exercici que consistia a utilitzar les paraules de la llista en una frase o paràgraf.

La columna de la dreta amb les paraules en valencià, per a qui vullga escriure en esta llengua:

Sonoro             sonor
fuente              font
hasta               fins a / fins i tot
rosa                rosa
brazo             braç

Ejemplo:


Se marchó alargando su brazo, pero no para decir adiós sino para dar un sonoro portazo. Hasta la cortina de la ventana tembló. Me quedé observándolo a través del cristal, mientras recorría el sendero del jardín hasta llegar a la puerta de la verja; los pétalos de una rosa seca flotaban sobre el agua de la fuente circular, la  que compramos juntos cuando estrenamos la casa. 


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Exemple:

Se'n va anar allargant el braç, però no per a dir adéu sinó per a donar un sonor cop de porta. Fins i tot la cortina va tremolar. Em vaig quedar observant a través del vidre de la finestra, mentre recorria el sender del jardí fins arribar a la porta de la tanca; els pétals d'una rosa seca flotaven sobre l'aigua de la  font circular, aquella que vam comprar junts quan estrenàrem la casa. 

Para trabajar en casa hemos dictado otra lista de palabras:

copa               copa
luces              llums
a                    a
caracol         caragol
dos                dos

Hay que ponerlas en una frase, o un párrafo, microrelato, etc., podéis cambiar el género o número de las palabras, cuando se pueda. 
También podéis utilizar esta frase:

Sentado en lo alto del caparazón de la tortuga ¡cabalgando por el mar como si fuera a caballo!

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Assegut sobre la closca d'una tortuga, cavalcant pel mar com si anara a cavall!

para incluirla, sin partirla, en un microrelato o relato corto. La podéis poner en el inicio, a mitad, al final... de vuestro escrito, donde queráis. 

¡ Sed creativos !